Ciudad maya
El gobierno durante el periodo clásico se centraba en el concepto de «rey divino», que se consideraba que actuaba como mediador entre los mortales y el reino sobrenatural. La realeza era patrilineal y el poder solía pasar al hijo mayor. Se esperaba que un futuro rey fuera un exitoso líder de guerra, además de gobernante. Los sistemas de patrocinio cerrados eran la fuerza dominante en la política maya, aunque la forma en que el patrocinio afectaba a la composición política de un reino variaba de una ciudad-estado a otra. En el periodo Clásico Tardío, la aristocracia había crecido en tamaño, reduciendo el poder anteriormente exclusivo del rey. Los mayas desarrollaron sofisticadas formas de arte utilizando materiales perecederos y no perecederos, como la madera, el jade, la obsidiana, la cerámica, los monumentos de piedra esculpida, el estuco y los murales finamente pintados.
Las ciudades mayas tendían a expandirse orgánicamente. Los centros de las ciudades estaban formados por complejos ceremoniales y administrativos, rodeados por una expansión irregular de distritos residenciales. Las diferentes partes de una ciudad solían estar conectadas por calzadas. Desde el punto de vista arquitectónico, los edificios de la ciudad incluían palacios, templos-pirámides, canchas de baile ceremoniales y estructuras especialmente alineadas para la observación astronómica. La élite maya sabía leer y escribir y desarrolló un complejo sistema de escritura jeroglífica. El suyo era el sistema de escritura más avanzado de la América precolombina. Los mayas registraron su historia y sus conocimientos rituales en libros en forma de biombo, de los que sólo se conservan tres ejemplos incontestables, ya que el resto fueron destruidos por los españoles. Además, se pueden encontrar numerosos ejemplos de textos mayas en estelas y cerámicas. Los mayas desarrollaron una serie muy compleja de calendarios rituales entrelazados y emplearon las matemáticas, que incluyen uno de los primeros ejemplos conocidos del cero explícito en la historia de la humanidad. Como parte de su religión, los mayas practicaban el sacrificio humano.
Jerarquía de los mayas
¿Se le ocurre alguna gran cultura del mundo antiguo? Probablemente te vengan a la mente los griegos y los romanos. También podría pensar en los antiguos egipcios y babilonios. Si te gusta aprender sobre los pueblos antiguos, ¡estás de suerte! La maravilla del día de hoy trata de otra gran sociedad. ¿De quién estamos hablando? De los antiguos mayas, por supuesto.
El Imperio Maya se asentaba en la zona que hoy muchos llaman Guatemala. Con el tiempo, creció hacia el norte. Llegó hasta el actual México. Como cultura, los mayas eran expertos en muchas cosas. Entre ellas, la agricultura, el lenguaje, las matemáticas, el arte, la arquitectura y la astronomía.
La cultura maya alcanzó su apogeo durante el siglo VI d.C. Misteriosamente, sólo unos cientos de años después, desapareció. Hacia el año 900 d.C., casi todas sus grandes ciudades de piedra habían quedado vacías. ¿Qué pasó con este gran imperio?
Durante cientos de años, los mayas prosperaron en el sur de México y América Central. Su población llegó a ser muy numerosa. En su punto álgido, la densidad de la población maya era similar a la de la actual Los Ángeles. El imperio contaba con más de 2.000 personas por kilómetro cuadrado.
Inventos mayas
Gran parte de estos antiguos conocimientos se perdieron cuando los conquistadores españoles arrasaron las extensas bibliotecas y centros administrativos mayas, pero, afortunadamente, los mayas registraron parte de su historia y sus predicciones en inscripciones de piedra que pueden verse hoy en día en estelas y en los restos de elaboradas ciudades, edificios y templos que sobrevivieron a siglos de invasión de la selva.
Aunque el inicio de la primera ocupación está abierto a debate, el calendario de cuenta larga maya da como fecha de creación maya el 11 de agosto de 3114 a.C., y los rastros de ocupación maya en Cuello, en Belice, fueron datados recientemente con carbono en torno al 2600 a.C.
El Preclásico Temprano Maya, del que tenemos algunos de los primeros ejemplos de cerámica y arte maya, duró entre 1800 y 900 a.C., y a lo largo del Preclásico Medio Maya (900-300 a.C.) la civilización siguió creciendo, de modo que en el 800 a.C. los mayas de las tierras altas de Guatemala controlaban las importantes rutas comerciales de jade y obsidiana hacia el Petén y el Pacífico, y en el 600 a.C. ya producían y comerciaban con cacao.
Lengua maya
Su historia a lo largo de estos cuatro milenios es un avance y un logro notables. Tradicionalmente cazadores y recolectores de alimentos, alrededor del año 2000 a.C. estos antiguos nativos guatemaltecos comenzaron a depender principalmente de la agricultura. El maíz era su principal alimento, complementado con frijoles nativos y otros cultivos. Las primeras comunidades sedentarias eran pequeñas, con una docena de casas. Se conocía el arte de la alfarería, aunque los productos eran relativamente sencillos. Se tejía algodón y otras fibras. Las herramientas y las armas eran de piedra. La parafernalia religiosa o ritual era sencilla: figuritas de cerámica y simples incensarios. Los arqueólogos encuentran en estos pueblos los primeros ejemplos de arquitectura especializada. Al principio, las plataformas o edificios eran relativamente pequeños, pero más tarde algunos de ellos tienen un tamaño que sugiere que eran construcciones de trabajo corporativo.
Los estímulos extranjeros se detectan en las formas particulares de las elaboraciones culturales. Las influencias olmecas fueron asimiladas en la emergente civilización maya. Las formas y rutas por las que esto tuvo lugar son complicadas y aún no se comprenden del todo. Sin embargo, es importante dejar claro que no se trató de una simple transferencia de un sistema cultural olmeca completo o de un sistema cultural completo de las Tierras Altas y el Pacífico a los mayas de las Tierras Bajas. Se proporcionaron estímulos, pero las ideas así transmitidas fueron reelaboradas y surgieron de manera muy diferente. Se convirtieron en algo totalmente maya, y en los ámbitos artístico e intelectual los mayas de las tierras bajas superaron con creces a cualquier otro pueblo.